Restauración de carteles con retoque virtual… o virtuoso

Los ciclistas de Sants llegaron al taller chirriando, más que pedaleando!
Desgarros, rotos, fóxing, oscurecimiento, fragilidad, acidez…. Todos estos daños han sido tratados con esmero para que puedan llegar esplendorosos a su meta, el Archivo Municipal de Barcelona. Os estarán esperando en Sants-Montjuïc, mientras dure la recién inaugurada exposición comisariada por Daniel Venteo.
Porque, ¿quién dice que con 74 años no se debe sacar copete o ir en bicicleta? Fijaos sino en Ricardo, el ciclista… quién lo ha visto, y quien lo ve: le da una catalana vuelta, y las que convenga, a carteles mucho más jóvenes!

Y ¿qué decir de su coche-escoba y séquito de ciclistas de Passarell? que son casi centenarios… y ahora estan corriendo como locos por el depósito! Espavilaos si queréis verlos.

Dejadme que os explique brevemente los tratamientos de salud y belleza por los que han pasado (haciendo clic en la imagen se detalla la información de cada proceso):

Limpieza en seco, húmeda, desacidificación y consolidación (que incluye el aprestado, la reintegración de partes perdidas, y la laminación, es decir, el añadido de un refuerzo de papel en toda la superficie trasera).
 
Una vez reconstituídos y revigorizados, los hemos maquillado un poquitín, que uno no va cada día a que lo expongan. Es un retoque que acompaña y sugiere. Facilita la lectura del documento sin robar más protagonismo que el que tiene que tener. No se trata de ocultar que estos deportistas pertencen a la categoría de ultra-veteranos, a la sección histórica, porque se lo han ganado a pulso y esto nos enorgullece.
 
Para no inventar con estos retoques nada que no hubiera habido realmente, hemos recorrido a la tecnología digital: Con un archivo TIFF de un ejemplar completo del mismo cartel, hemos hecho una superposición sobre el tullido Ricardo (previamente pasado a bytes), y una vez conocida y aislada la parte que faltaba, la hemos impreso en un papel. Con esta plantilla se ha hecho un calco en la laguna del cartel, el de veras, el de papel corpóreo y virtuoso, que no virtual. Virtuoso porque el retoque no se ha hecho sobre el original, sino en las partes añadidas de las lagunas: un papel japón de largas fibras y no menos larga conservación.

Y no dejéis de ver el video realizado por Eva Guillamet, en él hallaréis el montaje de la exposición, y el proceso de restauración de documento coche-escoba (minuto 2:39″). IMPERDIBLE!!!
Ni tampoco el reportaje fotográfico que hizo en el taller, o el álbum facebook con imágenes del montaje de la exposición.

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